Cuando una se pone enferma en serio no tiene ni la menor idea de la cantidad de decisiones que ha de tomar de lo más extraño y dificultoso.Tengo una pequeña mini-crisis ya que los derroteros de mi enfermedadhan llegado al punto crucial de que me enfrente a la verdad: ¿deseo quedarme calva o por el contrario quiero tener la piel azul…?¿A que alucina todo esto? , pues es la "puritita" verdad. Mi santo esposo me prefiere azul. Yo opto por calva ¿Qué hago? Os explico: ya sé que no os estáis enterando de nada, pero ya os comenté que estoy en mini-crisis… Como ando con el rollo de la quimio y ya sabéis que dicen que se cae el pelo, de momento no se me ha caído, pero previniendo tal eventualidad uno de mis hermanos – el más existencial- me ha traído un mejunje hecho con agua destilada y algo así como enriquecida con iones cargados de partículas de plata, le llama "plata bebible", y - dice- es un potente antiséptico que impedirá que se me caiga el pelo pero tiene una sola contraindicación: la piel se te va convirtiendo poco a poco en azul…Al principio me hacía gracia eso de tener la piel azulada ¡qué romántico!, pero después pensé:"Pelirroja y con la piel azul me van a llamar La Pitufa y no me va a hacer ninguna gracia, además el azul se va intensificando hasta quedar añil y en ese caso parecería Visnú… No sé, no me convence. Yo me bebo el agua y me miro al espejo a ver el color de mi tez…? Nada, por otra parte, examino las ventajas de quedarme calva , una que se me ocurrió es bastante buena: No tendré que dar explicaciones a nadie de por qué estoy más delgada y más vieja: todo el mundo sabrá que tengo cáncer. La otra es monetaria: me ahorro un pastón en peluquería y champuses, no me tengo que peinar y además me puedo tatuar algo bonito – como un libro por ejemplo- en la cabeza…En fin aquí ando dándole vuelta a las opciones que tengo ¿Qué haaaagggooo?Ayuda…
Lola Bertrand
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